26 de enero de 2012


Nos hemos destruido la vida, arruinado la existencia y contabilizado los azotes. Teníamos por diversión jugar al poker en la delgada linea que separa el amor del odio. Nos escupíamos y amábamos con tanta locura que ninguno de vosotros, valientes imbéciles, podréis conocerlo jamás. Destruimos los malditos estereotipos y las aguas más saladas, mientras desde arriba, desde muy arriba, dominábamos en mundo. Fuimos reyes de nuestras horas y vagabundos de todo lo demás.
Has sido lo mejor que se ha subido al ring.

18 de enero de 2012


Te quiero libre, te quiero entero y completo, con el corazón desabrochado y la mirada cortante. Te quiero enfadado y cabrón, con las garras encendidas y la boca húmeda. Te quiero cerca, tan cerca que tu barba me peine la piel, tu saliva perfume mi espalda y tus brazos midan mi cintura. Te quiero poeta, músico y vagabundo. Te quiero feliz, con las palabras exactas y la cama deshecha. 

14 de enero de 2012

Os han dejado de arder las manos y andáis recostando vuestros cuerpos por fríos muros desgastados por la muchedumbre. Pagáis por calor y os morís por él. Habláis en auditorios sobre la incipiente levedad del ser y la independencia lineal y sarcástica que empaqueta vuestra existencia, felices y estúpidamente vacíos. Envolvéis vuestros miedos y anudáis los sentimientos. No sabéis amar, no queréis amar, sólo aceptáis derrochar adrenalina sin tacto, sin llanto, sin vida. Estáis muertos.